1987, cayó en mis manos un libro de recetas EL CASERIO EN PLATO, de una gran cocinera, María Pilar Jerez. Todo hay que decirlo, como mi gran afición era la cocina y me compraba y coleccionaba todo aquel libro o receta que me llamara la atención, este libro no cayó en mis manos porque sí. Tuve que comerme no sé cuántas cajas de quesitos para que me tocara el libro (iba por puntos), y cuando llegó a mis manos me puse...manos a los fogones.
Tiene muchísimas recetas geniales, pero la que más popular me ha hecho entre mis conocidos es el PASTEL DE QUESO. En todos estos años he hecho algunos cambios en la receta original, pero básicamente la crema de queso es la misma, y no, no he probado nunca con otro tipo de queso. ¿La vaca que ríe? ¿Marcas blancas? Pues sería cuestión de probar, no digo que no...pero cuando una receta está prácticamente perfecta, para qué cambiarla? Si alguien se anima con ella y cambia el queso, espero que me deje sus comentarios y me diga qué tal le fue...yo seguiré fiel a mis quesitos de toda la vida; lo he sido 25 años, siempre me han dado buen resultado, y me parece una infidelidad total. Espero que la probéis en casa y que os guste... por cierto, la parte de "cascar" los huevos y batir, o de preparar la galleta picada, es perfecta para los niños! Ya sabeis...yo como siempre metiendo a los peques en la cocina!!
Ingr. para la base: 150 gr. de galletas tipo Digestive, 75 gr. de mantequilla, 2 cucharaditas de azúcar.
Ingr. para el relleno: 48 porciones de quesitos El Caserío (con lo que me gusta a mi hacer publicidad...), 6 huevos, 150 gr. de azúcar.
Prep: Hay que machacar las galletas hasta dejarlas bien trituradas. Quien tenga picadora, genial, pero a mi me gusta llamar a mi hijo pequeño, que ponga las galletas dentro de una bolsa de congelación (bien resistente, de ésas con ZIP), cerrarla, y darle un martillo de madera de cocina. Cuando era más pequeño le decía que se imaginara que era Thor con el martillo...ahora dá igual, le sigue gustando sea o no Thor. Hay que darle golpes secos hasta machacarlas bien. A mi, personalmente, me gusta más este método porque siempre suelen quedar pequeños trocitos, y a la hora de comer la tarta luego, la hace más interesante (pero es una opinión).
A parte, derretir la mantequilla.
Mezclamos la mantequilla con la galleta picada y el azúcar muy bien.
En un molde redondo, engrasado y enharinado para evitar que se pegue, ponemos la base de la tarta, esta mezcla de galleta, apretando bien.
A parte, en un bol, ponemos todos los quesitos junto con el azúcar y batimos bien. No recomiendo batir a mano, porque es tarea harto complicada. Mejor utilizar batidora de varillas y nos ahorramos un disgusto.
Cuando esté bien mezclado, añadimos los huevos, uno a uno. El truco para que salga bien esta tarta, que es sencillísima, es no añadir un huevo hasta que el anterior se haya mezclado perfectamente; hacedme caso.
Una vez mezclados y bien batidos los 6 huevos, obtendremos una crema bien homogénea. La echaremos encima de la base de galleta.
Hornear a horno precalentado, 160º hasta que pinchemos con una aguja y salga limpia. Depende del horno, pero suele tardar una hora o así. Yo la cubro a mitad de cocción con papel de plata para que no se queme, y lo retiro a lo último.
Sacar del horno y dejar enfriar en una rejilla.
Una vez fría, cubrir con mermelada a gusto (de arándanos, de fresa...)
Y guardar en la nevera hasta el momento de servir.
De momento, de todas las diferentes tartas de queso que hago ésta y otra receta que ya subiré más adelante son las que más me solicitan, así que espero que os animéis a cocinarla y que me comentéis si os ha gustado!
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